Quieres cambiar de vestuario como cambian la estaciones del año… Sí puedes hacerlo !Dale!, pero ten en cuenta las prendas que nunca pasan de moda.
Una chaqueta de jean
Es una prenda versátil y que funciona en diferentes look el truco es hacer ver la clásica chaqueta de jean contemporánea. Busca una chaqueta de jean con cuello en O y correderas, en vez de los clásicos botones de metal redondos. Puedes contrastarla con un short o pantalón de flores y una camiseta blanca de algodón.
Un vestido de rayas
Ya sean gruesas, delgadas o de varios tamaños las rayas siempre se ven casuales y evocan la frescura del mar. Puedes usar un vestido en algodón con accesorios dorados o con nudos y acentos rojos. Ten en cuenta que las rayas diagonales y verticales estilizan más la figura. Puedes ponerte una pashmina si el clima no es tan cálido o llevar una chaqueta para el frío.
Un pantalón suelto
Este tipo de pantalón es más confortables que un pantalón ajustado y a veces un respiro no hace daño, sobre todo en esos días que no quieres que nada te apriete. Materiales como la seda dan un toque de elegancia, crean hermosos pliegues y pueden ser usados con camisas sueltas para un look relajado. Para un atuendo más elegante y estructurado un corset en cuero o encaje.
Una chaqueta blanca
Este color es jovial y muy fresco, para climas templados va muy bien. Es muy versátil para usar de día o de noche, puedes usarla con una mini falda en la noche o un pantalón en el día. Atrévete a usar un pantalón color pastel satinado y unos tacones metálicos para darle un toque muy femenino y chic.
Una falda con vuelo
Se usaban en los años 50 siguen de moda y que mejor al usar una falda con vuelo ya sea a la altura de la rodilla o a media pierna. Es una prenda cómoda y puede ser usada con la camisa por dentro o afuera para dar el efecto ideal y resaltar tu figura. Si tu falda es de un solo tono completa tu look con una camisa estampada o rayas.